100 CV y 125 CV, como en el caso del Focus, se pondrán a disposición de los C-Max y Grand C-Max. En estos vehículos, el motor 1.0 anuncia unos consumos respectivos de 5,1 l/100 km y 5,2 l/100 km, lo que deja los niveles de emisiones de CO2 en 117 g/km para el C-Max y 119 g/km para el Grand C-Max, quedando justo por debajo del límite 120 y por tanto sin abonar impuesto de matriculación.
Las claves del motor ya las conocemos: turboalimentación con una turbina de masa mínima, inyección directa, distribución variable en admisión y escape y refrigeración extra para evitar sobrealimentaciones gratuitas. Ahora la duda es saber cómo se moverán los C-Max y Grand C-Max con el molinillo de Ford, pero vistos los resultados con el Ford Focus 1.0 EcoBoost lo esperable es que funcionen bien con la diferencia de tara de unos 100 o 200 kilos que supone el cambio de carrocería.t
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